Segunda entrega con 5 consejos más para mejorar nuestras fotos, y por tanto nuestros álbumes digitales. En esta ocasión nos vamos a centrar sobre todo en el encuadre, y los retratos.
Recordaros que son consejos, ayudas, o recomendaciones, pero tampoco hemos de obsesionarnos con ellos, (a veces las “reglas” están para romperlas), y que cualquier duda la podrás consultar en nuestros datos de contacto que te ofrecemos pinchando aquí.
Utiliza un encuadre con tu motivo principal centrado solo cuando haya una simetría en la imagen (si doblases la fotografía por el centro, sobre una línea vertical imaginaria por el medio de la foto, coincidirían las dos mitades del motivo fotografiado). Por ejemplo un monumento como el Arco del Triunfo de París.
Si no es el caso anterior, mejor utilizar la regla de los tercios. Esta regla nos indica los 4 puntos de máximo interés de una fotografía, donde mejor quedaría el motivo fotografiado, o las 4 líneas imaginarias sobre las que situarlo.
Hay cámaras que permiten ver en pantalla dichas líneas y puntos (puedes usarlo hasta que te acostumbres).
Si dividimos la imagen con dos líneas horizontales y verticales, de manera que la foto quede dividida en tres franjas horizontales y tres verticales iguales, esas 4 líneas y los 4 puntos donde se cortan, son los de especial interés para situar tu motivo.
Siempre han de quedar perfectamente horizontales, y procurar no situarlos en el centro de la fotografía. Usar una de las dos líneas horizontales indicadas en el punto anterior, aproximadamente, según queramos darle mayor interés al cielo o al resto del paisaje.
En el ejemplo que hay debajo tal vez deberíamos haber dejado el horizonte más alto, sobre la línea del tercio superior, quitando parte del cielo que tiene poco interés al ser bastante “plano”.
En los retratos intenta siempre enfocar los ojos. Es muy importante que los ojos salgan muy bien enfocados para que el retrato transmita. Si el sujeto está de frente podemos enfocar a cualquiera de ellos, ya que estarán a la misma distancia de nuestra cámara. Si el sujeto está de lado, enfocar al ojo más cercano a la cámara.
Intentar no fotografiar a una persona mirando al lado de la foto donde hay menos espacio. No suele quedar bien, y da sensación de agobio. La mirada, o el movimiento (si por ejemplo fotografiamos una persona andando) han de quedar en la dirección en la que hay más espacio (como el ejemplo a continuación).
Cuando la persona retratada mira hacia un lado, lo mejor es situarla sobre una de las líneas verticales de los tercios, explicados en el punto 2 de este post, y por el contrario cuando el sujeto mira de frente a cámara es mejor centrarlo en el encuadre, como en el ejemplo del punto anterior (la foto de la cara de la muñeca).
Por supuesto que si lo que queremos transmitir con nuestra fotografía es esa sensación de agobio, angustia, etc, romperemos esta “regla”.
No te olvides que si ya tienes fotos de momentos que te gustaría conservar para el recuerdo y poder compartir, nosotros nos encargamos de todo. ¡Anímate y encarga tu álbum!